Barcelona supo manejar un partido lleno de intensidad contra el Real Madrid. El conjunto de Luis Enrique logró levantarse de un gol en contra para llevarse por 2-3 el Clásico Español gracias a la genialidad de Messi.
El Santiago Bernabéu fue testigo de un partido que desde un principio tuvo un buen nivel, siendo los locales los que mayor peligro generaban.
Cabe destacar que desde el minuto uno del juego la polémica arbitral comenzó, luego de que Cristiano Ronaldo cayera dentro del área culé tras una golpe que le propinó Umtiti. El nazareno decidió no marcar penalti a favor de los blancos.
Al minuto 21 el partido se tuvo que detener unos segundos después de que Messi comenzara a sangrar tras un fuerte codazo que le dio Marcelo en una disputa por el balón.
El marcador del Bernabéu se abrió al 28' gracias al tanto que marcó Casemiro luego de recuperar un rebote y mandar el balón a segundo palo.
Sin embargo, la alegría de los merengues no duró mucho, ya que cuatro minutos después, el equipo de la Ciudad Condal logró igualar el resultado con una diana que consiguió Messi tras superar a la defensa rival y vencer en un mano a mano a Keylor Navas.
La parte complementaria comenzó de igual forma que el primer tiempo, los dos equipos intentaron sorprender al rival con jugadas de verdadero peligro.
La primer de ella fue un potente disparo de Kroos, le cual detuvo de forma magistral Ter Stegen. De forma inmediata los culé respondieron, pero Navas también demostró su buen nivel bajo el arco.
Los minutos se consumían y los porteros seguían luciéndose frente a las fallas que cometían las delanteras. Acción que terminó al 73' con un zudazo que consiguió Rakitic, Keylor se lanzó, pero no llegó para detener el disparo del croata que ponía el 1-2.
Tras la segunda diana en contra, el Real Madrid se quedó con un menos. Al minuto 78, Sergio Ramos se fue a los vestidores antes de tiempo por cometer una fuerte entrada sobre Messi.
Cuando parecía que los merengues tenían todo en contra, James Rodríguez entró al terreno de juego y de forma inmediata marcó diferencia al conseguir el segundo tanto para su equipo.
Barcelona dejó claro que no quería repartir puntos con los merengues, y al minuto 92 apareció Messi para marcar de zurda el tanto con el que los blaugranas vencieron a los blancos por 2-3.