Mohamed Salah, futbolista del Liverpool, dijo que lo que le ocurrió en 2018, cuando se tuvo que marchar sustituido a la media hora de la final contra el Real Madrid, es "lo peor que le puede pasar a un futbolista".
"Fue lo peor que le puede pasar a un futbolista", explicó el egipcio en rueda de prensa. "Nunca había sentido algo como eso en el futbol, sobre todo porque era nuestra primera final para todos. Después nos unimos más y fuimos por ella y conseguimos una especie de venganza al ganarla al año siguiente", añadió.
"Todo el mundo está motivado, por lo de 2018 y por lo del domingo. Todas las temporadas que he estado aquí hemos luchado por ello", agregó el punta africano.
Salah, que termina contrato en junio de 2023, no quiso hablar sobre una posible renovación tras la final de la Champions.
"No estoy pensando en el contrato. No quiero pensar en ello. Ahora lo que importa es el equipo, porque es una semana muy importante. Quiero la Champions, es así", apuntó.
"La temporada que viene me quedo, eso es seguro, para el resto queda mucho", añadió.
Sobre Luis Díaz, la revolución del Liverpool, esta temporada, Salah bromeó y dijo que aún no habla mucho inglés, pero que no es un problema porque hay muchos españoles y portugueses -jugó en el Porto- en el vestuario.
"Lo está haciendo muy bien. Nos ha dado mucho en muchos partidos", puntualizó el egipcio.
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