Todavía con la resaca tras clasificarse para el Mundial de Qatar 2022, Gales no pudo con los Países Bajos, líder con pleno de victorias en el Grupo 4 de la Liga de Naciones, y cayó 1-2 con un tanto en el tiempo añadido de Wout Werghorst para cerrar una racha histórica de 19 partidos sin perder como local.
Esta semana Gales celebró su regreso a una Copa del Mundo 64 años después. Pero, por el camino, descuidó la Liga de Naciones. Ya perdió su primer encuentro frente a Polonia (2-1) en medio de la preparación del choque trascendental ante Ucrania. Y, después, embriagado por las celebraciones, ha vuelto a caer contra los Países Bajos.
El tanto de Werghorst en el minuto 94, apenas uno después del empate de Rhys Norrington-Davies, acabó con la racha más larga sin perder en casa en los 146 años de historia de la Asociación de Fútbol de Gales. Hasta el choque contra los Países Bajos, ganó 13 partidos y empató 6, unas cifras que acabaron de un plumazo gracias al acierto de Koopemeiners.
Rob Page hizo cambios en su alineación y sentó en el banquillo a hombres importantes como Bale, Aaron Ramsey y Joe Allen. Dio entrada a Joe Rodon, Connor Roberts, Daniel James y Ben Davies, que se enfrentaron a un equipo que también apostó por hacer variaciones: Frenkie Jong, Memphis Depay o Jasper Cillessen, no salieron desde el inicio; sí lo hicieron Stefan de Vrij, Weghorst y Mark Flekken.
Con esos cambios, ambos equipos disputaron una primera parte extraña, sin un dominador claro y con pocas ocasiones. Demasiado tanteo por parte de las dos selecciones, que solo dejaron ver una opción clara, la que tuvo Cody Gakpo al borde del descanso con un disparo que se marchó rozando un palo de la portería defendida por Danny Ward.
La situación no varió mucho tras la reanudación con una excepción: Koopmeiners, en la que tuvo, acertó. El medio del Atalanta acertó con un disparo cruzado ajustado que puso por delante a los Países Bajos. Los hombres de Van Gaal, con los tres puntos encarrilados, sólo tuvieron que mantener la línea del resto del choque.
Gales, intentó reaccionar, pero la salida al verde de Frenkie de Jong dejó al equipo de Page sin la pelota. La última esperanza, Bale, apareció tarde, a falta de trece minutos y no fue el ex jugador del Real Madrid quién acaparó el protagonismo de su equipo. Éste se lo llevó Norrington-Davies, que provocó el delirio de su afición con un soberbio cabezazo con el que empató el choque en el minuto 92.
Entonces, de la alegría se pasó a la decepción en apenas un par de minutos. También de cabeza, Werghorst aprovechó un centro desde la banda izquierda de Tyrell Malacia para acabar con la impresionante racha de partidos sin perder que acumulaba Gales. El récord, se quedó en 19. Será difícil superarlo.