El técnico brasileño Luiz Felipe Scolari reconoció que estuvo muy cerca de convertirse en el entrenador del Boca Juniors el año pasado y que en algún momento tendrá la oportunidad de dirigir a este club argentino.
“Fue cierto que Batistuta habló conmigo para dirigir a Boca Juniors. Esto hubiera pasado si Beraldi y Batistuta ganaban la elección, pero lamentablemente esto no pasó. Me gusta Boca, va a haber oportunidad para dirigirlo. Me gusta como juega, como hace frente al partido, como se comporta, pero también tengo identificación con todos los clubes que dirigí en todos los lugares de mundo. Pero si, tengo bastante identificación con Boca, y desde aquí estaré alentando a Boca en los últimos años”, señaló el entrenador de 69 años en diálogo con 'Radio Mitre'.
En otro guiño al conjunto 'xeneize', Scolari manifestó: “A mí me gustaba más el estilo del Boca de Guillermo que el River de Gallardo. Ese Boca tenía una forma más clásica y bonita de jugar, me gustaba más el equipo de Guillermo. Me gustaba mucho ver jugar a ese equipo de Boca. El equipo de River también juega bien, pero es diferente, pero yo gusto del estilo guerrero y fuerte de Boca. Yo no tengo relación con Gallardo, pero si con Guillermo, nos hemos enfrentado en algunos partidos, tengo buena relación con él y tengo una reciprocidad de pensamiento, me siento bien cuando hablo con él”.
“Está muy bien que se diga que Gallardo está entre los mejores del mundo, y creo que él ya podría estar en algún club de Europa desde hace unos años. En Sudamérica hay muy buenos técnicos, pero principalmente los técnicos argentinos que están yendo más a Europa que los técnicos brasileros”, argumentó.
Con respecto a la posible vuelta del futbol brasileño en el contexto de pandemia por coronavirus, 'Felipao' sentenció: “Mi opinión con respecto a la vuelta del futbol es que se dé más tiempo hasta que la situación sea la normal y evitar futuras consecuencias. Creo que en agosto o septiembre se podría estar en una situación normal”.
El experimentado entrenador padeció la peor derrota en la historia del fútbol brasileño, la goleada ante Alemania en el Mundial de Brasil 2014 y no ocultó sus sentimientos: “El 7 a 1 con Alemania fue la derrota más dura que me tocó sufrir, porque fue con la selección de mi país. Es una derrota que va a quedar marcada, para nosotros como también para Alemania. Fue algo muy triste en la secuencia de la vida y en el trabajo”, no obstante añadió: “Si se repitiera ese partido claro que cambiaría algunas situaciones y podría ser diferente porque uno ya sabe lo que pasó y pensaría en cambiar detalles después de lo que sucedió. Pero ya pasó y hay que asimilar y seguir la vida”.