Iridia Salazar tuvo muchas pruebas difíciles que superar durante su participación en Exatlón México, pero la más dura fue alejarse de sus hijos y esposo. La taekwondoín tenía varios años retirada del deporte de alto rendimiento, estaba dedicada por completo a su familia, pero una vez que surgió la invitación para la emisión deportiva, quiso aprovechar la oportunidad para que sus hijos conocieran un poco más de ella como atleta.
“Me había alejado del alto rendimiento, me concentré en ser mamá y consolidar mi matrimonio, todo eso te demanda mucho, en cierta manera requiere el 100 por ciento de tu tiempo, se presentó está oportunidad de estar en Exatlón, retomar lo que hice hace muchos años, que es el deporte, estar concentrada en ello y no quise desaprovecharlo,
"Quería que mis hijos conocieran esa parte de lo que es su mamá, no conocían como era mamá como deportista”, compartió Iridia Salazar.
La medallista olímpica tiene 10 años de casada y es mamá de dos niños, ésta es la primera vez que se separa de sus seres queridos. La atleta confesó que eso le causó muchos momentos de flaquez durante la competencia, pero pensaba en el apoyo de sus familiares para mantenerse motivada.
“Nunca nos habíamos apartatado más de tres o cuatro días, siempre tratamos de estar en familia, mi esposo fue una de las principales fuentes de motivación para que entrara en Exatlón.
"Tenía mucho miedo, el desprendimiento a tus hijos es algo doloroso, el saber que no vas a tener contacto con ellos, tú entras pero no vas a saber nada, psicológicamente lo piensas, mi esposo me dijo que no me preocupara, que él se iba a hacer cargo de todo y así fue", explicó.
Afortunadamente todo esto quedo atrás, Iridia salió de la competencia el pasado viernes y de inmediato voló a México para reencontrarse con sus seres queridos, quienes se encargaron de recibirla con detalles a su llegada al aeropuerto capitalino.
“Una hora antes de llegar a México no podía contener el llanto, me sentía muy emocionada, fueron casi dos meses que no los veía, no sabía nada de ellos y estaba muy emocionada por verlos, cuando nos reencontramos los abracé y apapaché, no me cansé de decirles cuánto los amo”, recordó.
