Lisandro Magallán, defensa recién llegado a Pumas, tiene otro amor igual de fuerte que el que siente por el futbol, y es la panadería, que es una herencia familiar.
Y es que el central argentino es parte de una dinastía que desde hace más de 20 años ha dejado huella en el paladar en Mar del Plata gracia a 'La Casa de Maga', panadería fundada por el padre del zaguero auriazul y que se ha hecho famosa por sus medialunas, lo que en México se conocen como croissant, y que el periódico argentino Clarín, relató la historia del negocio que tiene ya ocho locales que maneja la familia y 24 sucursales en La Plata y Buenos Aires.
De acuerdo al diario, el gusto por la panadería nació en los Magallán gracias al abuelo de Lisandro, pero el futbol siempre estuvo presente ya que Adalberto Magallán (padre del felino), quien jugó en Gimnasia y Esgrima, quien luego de probar si tenía la destreza de su padre en el pan, en 1999 inauguró 'La Casa de Maga'.
El padre de Lisandro falleció en 2018 y a partir de entonces la madre Elsa y los hermanos del ahora jugador de Pumas: Ramiro y Santiago (quien también jugó futbol con San Lorenzo), se hicieron cargo del negocio familiar.
Y aunque ahora sólo Lisandro es quien juega futbol, también se mantiene pendiente del negocio familiar. Además de que se considera todo un experto en saborear las medialunas de su padre, quien siempre se encargó de checar la calidad de su producto:
"Todos los dias pedía que le envíen medialunasy facturas a casa para probar cómo estaban saliendo. Aunque me hizo un experto, no tenía en cuenta que comer medialunas todos los días era contraproducente cin mi carrera", dijo Lisandro Magallán entre risas al periódico Clarín.