Las temperaturas en la región centro-norte de Estados Unidos se desplomaron debido a una ola de intenso frío ártico, provocando el cierre de escuelas, negocios y oficinas de gobierno.
El Servicio Postal tomó la inusual medida de suspender la entrega de correspondencia en gran parte de la región.
Por otro lado, más de mil 600 vuelos fueron cancelados el miércoles en los aeropuertos de Chicago, y de ellos más de mil 300 se suspendieron en el aeropuerto internacional O’Hare, uno de los más grandes del país.
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El Servicio Meteorológico Nacional de Chicago, informó a través de su cuenta de Twitter que dicho frío superó los récords mínimos que se han registrado en la última decada, llegando a los -30 grados, con vientos fuertes de 20 a 35 millas por hora; mientras que la sensación de frió por el viento se ubica entre -45 y -60 grados.
El intenso frío es resultado de una división en el vórtice polar, lo cual permitió que las temperaturas descendieran mucho más hacia el sur que lo normal. A consecuencia de ello, partes de la región centro-norte de Estados Unidos estaban más frías el miércoles que algunas zonas de la Antártida.
Las autoridades se enfocaban en proteger a los desamparados, los ancianos y los que residen en viviendas en mal estado. En Chicago, algunos autobuses fueron convertidos en albergues con calefacción.